Los primeros cérvidos conocidos, aparecen en el Mioceno de Eurasia, hace unos veinticinco millones de años. Estos poseían una cuerna que se mudaba cada año, como demuestran numerosos registros fósiles de desmogues y de cráneos sin cuerna; y habitaban en las zonas de clima templado de la actual Mongolia. Desde estas zonas, se expandieron por Europa y Norteamérica, colonizando durante el Plioceno, hace unos doce millones de años, el subcontinente indio y Sudamérica.
Hace un millón de años, durante el Pleistoceno, se produjo una etapa de “evolución acelerada” originándose un gran número de especies, algunas de las cuales han llegado hasta nuestros días, mientras que otras como el ciervo gigante, se extinguieron en época reciente.
El género Capreolus, es el único Telemetacarpalia (contienen los elementos distales del segundo y quinto metacarpo) exclusivamente euroasiático, los demás son americanos. Dicho grupo y género se reconoce por: la presencia en los machos de cuernas con tres puntas y abundante perlado, tener el escudo anal blanco con pelo erizable que rodea la rudimentaria cola y por tener una compartimentalizacion incompleta del estomago, lo que les impide digerir alimentos con abundante celulosa.
Hablando del Capreolus capreolus, es decir del Corzo, estamos hablando de una especie perteneciente a la familia de los cérvidos, del género: Capreolus, que se incluye dentro del grupo de los Ungulados. Los Ungulados; es un grupo de animales que designan a dos ordenes de mamíferos, caracterizados por su alimentación básicamente herbívora y por tener extremidades adaptadas a la carrera o salto y terminadas en pezuñas: Los Perisodáctilos (animales que al caminar apoyan un número impar de dedos sobre el suelo, como el caballo) y Los Artiodáctilos (animales que apoyan un número par de dedos sobre el suelo).
Teniendo en cuenta mi estudio, me interesaran, los Artiodáctilos, orden al que pertenece el corzo, junto con otras especies, como, el ciervo, gamo, antílopes etc.
Por el momento se acepta la existencia de dos especies distintas de corzo: el Corzo Siberiano (Capreolus pygargus) y el Corzo Europeo (Capreolus capreolus). Diversas investigaciones revelan importante diferencias entre ambas, no solo en su morfología, sino también a nivel
fisiológico y genético.
- La clasificación sistemática; habría que seguir la siguiente línea taxonómica:
Reino: Animal
Phylum: Chordata
Subphylum: Vertebra
Subclase: Gnatosthomata
Clase: Mammalia
Orden: Atiodactilo
Suborden: Ruminantia
Familia: Cervidae
Subfamilia: Odocoiliniae
Tribu: Capreolini
Género: Capreolus
Especie: Capreolus capreolus Linneus, 1758 (Corzo Europeo)
Capreolus pygargus Pallas,1771 (Corzo Siberiano)
- DESCRIPCIÓN
El Corzo, Capreolus capreolus, el mítico “Duende del bosque”, el menor de los artiodáctilos de Castilla y León, que esta presente en gran parte de la península ibérica.
Cérvido de pequeño tamaño, similar al de una oveja. De cuerpo atlético, con los cuartos traseros mas largos y elevados que los delanteros, adoptando un aspecto desproporcionado, y característico que le permite realizar largos saltos (1-5metros).
Tanto el tamaño corporal, así como el de su cuerna, va a depender mucho del alimento y estado de salud del animal. También hay diferencias locales de tamaño dentro de la población ibérica, siendo los corzos cantábricos los que alcanzan mayores tallas y pesos, mientras que los andaluces son sensiblemente menores.
Se considera una especie puramente forestal, de hábitos crepusculares, que sale a campo abierto en contadas ocasiones durante las horas de luz, permaneciendo escondido entre la espesa vegetación. También cabe mencionar, su marcada territorialidad, en el caso de los machos, que mantienen una zona de exclusión frente a otros congéneres de su mismo sexo durante gran parte del año. Este dominio vital esta en torno a las 7 hectáreas, y va provocar una prolongación del período de celo, de los machos, durante casi 6 meses al año (de abril a septiembre).
Decir que el corzo, sufrió un drástico descenso en sus poblaciones en la primavera de la mitad del siglo XX; pero en la actualidad es una especie en clara expansión, sobre todo por el avance de las áreas boscosas, además del continuo abandono de zonas cultivadas y el progresivo despoblamiento de las zonas rural.
-Medidas: es un animal de tamaño pequeño, que se caracteriza por:
- Peso: 15-35 kg.
- Longitud cabeza-tronco (sin cola):1-1.4m.
- Longitud del rabo: 2-3 cm.
- Altura a la cruz: 70-85 cm.
Estas medidas son de manera general, siendo muy variables entre las distintas poblaciones y notándose una diferencia entre los dos sexos, siendo ligeramente mayores en el caso del macho.
- Coloración: presenta una coloración uniforme, que varía a lo largo del año. Durante el invierno, presenta un color marrón-grisáceo, mientras que el pelaje estival es de tonalidad castaña-rojizo.
- Coloración del manto según la época del año. Izquierda: pelaje de invierno; a la derecha: pelaje estival. (Fuente: Internet)
Una de las características representativas de la especie, son: El escudo anal o especulo, que también tiene una variación de color, puesto que en los meses de frío, invierno, es de un blanco bastante intenso y de mayor tamaño; pero en verano se vuelve amarillento.
El escudo anal o especulo, a parte de servir de señal llamativa para mantener unida a la manada en la huida, es de gran ayuda como dimorfismo sexual, puesto que en los machos tiene forma arriñonada, y en las hembras, presenta un pequeño mechón de pelo en la parte inferior, dándole forma de corazón.
- Escudo anal o espéculo anal. Arriba: el macho y abajo: la hembra. (Fuente: Internet)
Otra parte de diferente color es el conocido como Babero; unas manchas blanquecinas que aparecen en la parte anterior del cuelo en la mayoría de las poblaciones. El bozal negro, que contrasta con el color blanco de la barbilla y labio superior, es otro rasgo muy marcado en la especie, que le hace inconfundible.
En España, el color varía según las distintas regiones:
- En la Cordillera Cantábrica: color del manto leonado-rojizo en verano y gris-amarillenta en invierno, con doble babero patente durante todo el año.
- Montes de León (zona oriental de la montaña leonesa): en mi zona de estudio, la misma coloración que los de la Cordillera Cantábrica, a excepción de no siempre tener presente el babero.
- Como curiosidad, decir que en diversas poblaciones de corzo, se han observado corzos blancos, negros e incluso manchados. (Dato: En las Salas, se encontró un corzo manchado). Esto se produce por una cuestión genética.
- Ejemplar de color negro; cazado en la provincia de Salamanca, en una zona cercana las Batuecas. (Fuente: Internet)
- Corzos blancos o albinos. (Fuente: Internet)
- Emisión de sonidos: el corzo emite un sonido, muy característico, el llamado “ladrido”, quizás por su similitud al de los cánidos. Apuntar que sus diferentes tonalidades tiene muy variados significados, desde la identificación de un intruso, un depredador; hasta la llamada de la hembra a la cría. También decir que ladra tanto la hembra como el macho, este dato de siempre ha creado problemas en recechos, puesto que muchas veces se cree que solo ladra el macho.
- Longevidad: tiene una vida media de 8-10 años, pero se dan casos de alcanzar los catorce años de edad. Muchos de ellos no pasan del primer año de vida, momento de alta mortalidad.
- Rastros: son numerosos los indicios que nos podemos encontrar en la naturaleza, para identificar su existencia. Como claros e importantes destacar:
1. Huellas: de aspecto estrecho y con marcado paralelismo entre los bordes internos de cada pezuña. Su tamaño es de unos 5 cm. por 3 de ancho. Las pezuñas de las extremidades anteriores son mayores que en las posteriores, lo que permite su diferenciación visual.
2. Excrementos: similares a los del ciervo, pero de menor tamaño: 7-14 mm.de largo por 7-10 mm. de ancho, con una coloración parda, oscuro-negro.
3. Otros:
- Camas
- Círculos de brujas (época de celo)
- Marcas en los árboles: escodaduras (borra) y territoriales (glándulas olorosas)
- Desmogues
- Escarbaduras en la nieve
- Sentidos: posee un sentido del oído muy desarrollado y selectivo; el olfato es excelente. La vista es el sentido menos desarrollado, pues se trata de un animal de bosque fuerte y poco iluminado, donde este sentido carece de importancia, aun así es muy sensible a los contrastes cromáticos y al movimiento.
- La Cuerna: es el más claro signo de dimorfismo sexual entre el macho y la hembra, al solo presentarse en el macho.
El termino cuerna, hace referencia a los apéndices cefálicos óseos característicos de la mayor parte de las especies de cérvidos, estructuras que son básicamente distintas, tanto en su origen como en su forma, de los cuernos propios de los bóvidos.
Se origina a partir de unas protuberancias o apófisis del cráneo, situadas en el hueso frontal, que reciben el nombre de pedúnculos de la cuerna, por lo tanto su origen es óseo.
La cuerna del macho, posee 6 puntas, normalmente; alcanzando su máximo desarrollo, en animales sanos, entre los 3-6 años.
Esta formada por una corona o roseta en su base, por un tallo principal que se va estrechando hacia el extremo y por una zona ramificada con tres puntas, una dirigida hacia delante, otra hacia atrás y la tercera hacia arriba. La parte baja del conjunto suele estar adornada con estrías longitudinales y pequeñas protuberancias a modo de verrugas que, en conjunto, se conocen como perlado. El color de la cuerna, marrón sobre fondo marfil, pero podrá variar, según el tipo de vegetación donde sea restregada.
El llamado Trofeo, muy apreciado por los cazadores, seria el grupo formado por las cuernas, los pedúnculos óseos y parte de los huesos frontales del cráneo.
A diferencia de los cuernos de los bóvidos, la cuerna tiene un ciclo a lo largo del año, con su respectiva caida, y la formación de una nueva cuerna. Después de la época del celo, entorno al mes de Octubre, se produce el desmogue, la caidad de la cuerna. Esta caída de la cuerna, se produce a destiempo; porque mientras sus congéneres, ciervos y gamos, se produce a final del invierno-inicio primavera; en el corzo tiene lugar durante el otoño. Una vez perdida la cuerna, sobre el pedúnculo aparece una superficie sanguinolenta que rápidamente cicatriza y cubre de piel.
- Ciclo de la cuerna.
Rápidamente empezará la formación de la nueva cuerna, a partir de noviembre, creciendo a razón de 3-4 mm cada día, y permaniendo siempre cubiertas por un tejido epidérmico muy vascularizado denominado terciopelo, borra o liber. Hasta que la cuerna alcanza su altura definitiva el tejido esta vivo, ampliamente irrigado y con terminaciones nerviosas. El proceso de mineralización conduce a endurecimiento progresivo y a la muerte del tejido.
La formación se completa con la pérdida del terciopelo, en el mes de Marzo, del que el animal se despoja frotando la cuerna contra las ramas bajas de árboles y arbustos, en los escodaderos; produciéndose de esta manera el descorreo o perdida del terciopelo.
Son muy comunes las numerosas anomalías en las cuernas, en las que las perdidas de puntas, las existencias de puntas suplementarias u otras modificaciones cambian sustancialmente el aspecto de la cuerna sobre el patrón general.
- Numerosas anomalías en la cuerna del corzo. (Fuente: Internet)
El origen de las malforciones es diverso. Si la cuerna no esta aún mineralizada, los golpes pueden producir fracturas que se traducen en perdidas de puntas o en desviaciones del tallo principal de la cuerna. Estos accidentes no suelen tener consecuencias en las cuernas de años sucesivos que en principio se desarrollaran normalmente.
Otras anomalías que afectan al desarrollo de las cuernas pueden tener origen parasitario, alimentario (desnutrición) u hormonal. Destacar las alteraciones testiculares que originan un crecimiento desmesurado, generando puntas suplementarias y un excesivo perlado.
- Típica anomalía con excesivo perlado. (Fuente: Internet)
Para estimar la edad de los corzos, al igual que en la mayoría de los cérvidos, se realizan estudios sobre la dentición; empleando la cuerna en un menor número de casos.
- HÁBITAT
Cérvido de pequeño tamaño, similar al de una oveja. De cuerpo atlético, con los cuartos traseros mas largos y elevados que los delanteros, adoptando un aspecto desproporcionado, y característico que le permite realizar largos saltos (1-5metros).
Tanto el tamaño corporal, así como el de su cuerna, va a depender mucho del alimento y estado de salud del animal. También hay diferencias locales de tamaño dentro de la población ibérica, siendo los corzos cantábricos los que alcanzan mayores tallas y pesos, mientras que los andaluces son sensiblemente menores.
Se considera una especie puramente forestal, de hábitos crepusculares, que sale a campo abierto en contadas ocasiones durante las horas de luz, permaneciendo escondido entre la espesa vegetación. También cabe mencionar, su marcada territorialidad, en el caso de los machos, que mantienen una zona de exclusión frente a otros congéneres de su mismo sexo durante gran parte del año. Este dominio vital esta en torno a las 7 hectáreas, y va provocar una prolongación del período de celo, de los machos, durante casi 6 meses al año (de abril a septiembre).
Decir que el corzo, sufrió un drástico descenso en sus poblaciones en la primavera de la mitad del siglo XX; pero en la actualidad es una especie en clara expansión, sobre todo por el avance de las áreas boscosas, además del continuo abandono de zonas cultivadas y el progresivo despoblamiento de las zonas rural.
-Medidas: es un animal de tamaño pequeño, que se caracteriza por:
- Peso: 15-35 kg.
- Longitud cabeza-tronco (sin cola):1-1.4m.
- Longitud del rabo: 2-3 cm.
- Altura a la cruz: 70-85 cm.
Estas medidas son de manera general, siendo muy variables entre las distintas poblaciones y notándose una diferencia entre los dos sexos, siendo ligeramente mayores en el caso del macho.
- Coloración: presenta una coloración uniforme, que varía a lo largo del año. Durante el invierno, presenta un color marrón-grisáceo, mientras que el pelaje estival es de tonalidad castaña-rojizo.
- Coloración del manto según la época del año. Izquierda: pelaje de invierno; a la derecha: pelaje estival. (Fuente: Internet)
Una de las características representativas de la especie, son: El escudo anal o especulo, que también tiene una variación de color, puesto que en los meses de frío, invierno, es de un blanco bastante intenso y de mayor tamaño; pero en verano se vuelve amarillento.
El escudo anal o especulo, a parte de servir de señal llamativa para mantener unida a la manada en la huida, es de gran ayuda como dimorfismo sexual, puesto que en los machos tiene forma arriñonada, y en las hembras, presenta un pequeño mechón de pelo en la parte inferior, dándole forma de corazón.
- Escudo anal o espéculo anal. Arriba: el macho y abajo: la hembra. (Fuente: Internet)
Otra parte de diferente color es el conocido como Babero; unas manchas blanquecinas que aparecen en la parte anterior del cuelo en la mayoría de las poblaciones. El bozal negro, que contrasta con el color blanco de la barbilla y labio superior, es otro rasgo muy marcado en la especie, que le hace inconfundible.
En España, el color varía según las distintas regiones:
- En la Cordillera Cantábrica: color del manto leonado-rojizo en verano y gris-amarillenta en invierno, con doble babero patente durante todo el año.
- Montes de León (zona oriental de la montaña leonesa): en mi zona de estudio, la misma coloración que los de la Cordillera Cantábrica, a excepción de no siempre tener presente el babero.
- Como curiosidad, decir que en diversas poblaciones de corzo, se han observado corzos blancos, negros e incluso manchados. (Dato: En las Salas, se encontró un corzo manchado). Esto se produce por una cuestión genética.
- Ejemplar de color negro; cazado en la provincia de Salamanca, en una zona cercana las Batuecas. (Fuente: Internet)
- Corzos blancos o albinos. (Fuente: Internet)
- Emisión de sonidos: el corzo emite un sonido, muy característico, el llamado “ladrido”, quizás por su similitud al de los cánidos. Apuntar que sus diferentes tonalidades tiene muy variados significados, desde la identificación de un intruso, un depredador; hasta la llamada de la hembra a la cría. También decir que ladra tanto la hembra como el macho, este dato de siempre ha creado problemas en recechos, puesto que muchas veces se cree que solo ladra el macho.
- Longevidad: tiene una vida media de 8-10 años, pero se dan casos de alcanzar los catorce años de edad. Muchos de ellos no pasan del primer año de vida, momento de alta mortalidad.
- Rastros: son numerosos los indicios que nos podemos encontrar en la naturaleza, para identificar su existencia. Como claros e importantes destacar:
1. Huellas: de aspecto estrecho y con marcado paralelismo entre los bordes internos de cada pezuña. Su tamaño es de unos 5 cm. por 3 de ancho. Las pezuñas de las extremidades anteriores son mayores que en las posteriores, lo que permite su diferenciación visual.
2. Excrementos: similares a los del ciervo, pero de menor tamaño: 7-14 mm.de largo por 7-10 mm. de ancho, con una coloración parda, oscuro-negro.
3. Otros:
- Camas
- Círculos de brujas (época de celo)
- Marcas en los árboles: escodaduras (borra) y territoriales (glándulas olorosas)
- Desmogues
- Escarbaduras en la nieve
- Sentidos: posee un sentido del oído muy desarrollado y selectivo; el olfato es excelente. La vista es el sentido menos desarrollado, pues se trata de un animal de bosque fuerte y poco iluminado, donde este sentido carece de importancia, aun así es muy sensible a los contrastes cromáticos y al movimiento.
- La Cuerna: es el más claro signo de dimorfismo sexual entre el macho y la hembra, al solo presentarse en el macho.
El termino cuerna, hace referencia a los apéndices cefálicos óseos característicos de la mayor parte de las especies de cérvidos, estructuras que son básicamente distintas, tanto en su origen como en su forma, de los cuernos propios de los bóvidos.
Se origina a partir de unas protuberancias o apófisis del cráneo, situadas en el hueso frontal, que reciben el nombre de pedúnculos de la cuerna, por lo tanto su origen es óseo.
La cuerna del macho, posee 6 puntas, normalmente; alcanzando su máximo desarrollo, en animales sanos, entre los 3-6 años.
Esta formada por una corona o roseta en su base, por un tallo principal que se va estrechando hacia el extremo y por una zona ramificada con tres puntas, una dirigida hacia delante, otra hacia atrás y la tercera hacia arriba. La parte baja del conjunto suele estar adornada con estrías longitudinales y pequeñas protuberancias a modo de verrugas que, en conjunto, se conocen como perlado. El color de la cuerna, marrón sobre fondo marfil, pero podrá variar, según el tipo de vegetación donde sea restregada.
El llamado Trofeo, muy apreciado por los cazadores, seria el grupo formado por las cuernas, los pedúnculos óseos y parte de los huesos frontales del cráneo.
A diferencia de los cuernos de los bóvidos, la cuerna tiene un ciclo a lo largo del año, con su respectiva caida, y la formación de una nueva cuerna. Después de la época del celo, entorno al mes de Octubre, se produce el desmogue, la caidad de la cuerna. Esta caída de la cuerna, se produce a destiempo; porque mientras sus congéneres, ciervos y gamos, se produce a final del invierno-inicio primavera; en el corzo tiene lugar durante el otoño. Una vez perdida la cuerna, sobre el pedúnculo aparece una superficie sanguinolenta que rápidamente cicatriza y cubre de piel.
- Ciclo de la cuerna.
Rápidamente empezará la formación de la nueva cuerna, a partir de noviembre, creciendo a razón de 3-4 mm cada día, y permaniendo siempre cubiertas por un tejido epidérmico muy vascularizado denominado terciopelo, borra o liber. Hasta que la cuerna alcanza su altura definitiva el tejido esta vivo, ampliamente irrigado y con terminaciones nerviosas. El proceso de mineralización conduce a endurecimiento progresivo y a la muerte del tejido.
La formación se completa con la pérdida del terciopelo, en el mes de Marzo, del que el animal se despoja frotando la cuerna contra las ramas bajas de árboles y arbustos, en los escodaderos; produciéndose de esta manera el descorreo o perdida del terciopelo.
Son muy comunes las numerosas anomalías en las cuernas, en las que las perdidas de puntas, las existencias de puntas suplementarias u otras modificaciones cambian sustancialmente el aspecto de la cuerna sobre el patrón general.
- Numerosas anomalías en la cuerna del corzo. (Fuente: Internet)
El origen de las malforciones es diverso. Si la cuerna no esta aún mineralizada, los golpes pueden producir fracturas que se traducen en perdidas de puntas o en desviaciones del tallo principal de la cuerna. Estos accidentes no suelen tener consecuencias en las cuernas de años sucesivos que en principio se desarrollaran normalmente.
Otras anomalías que afectan al desarrollo de las cuernas pueden tener origen parasitario, alimentario (desnutrición) u hormonal. Destacar las alteraciones testiculares que originan un crecimiento desmesurado, generando puntas suplementarias y un excesivo perlado.
- Típica anomalía con excesivo perlado. (Fuente: Internet)
Para estimar la edad de los corzos, al igual que en la mayoría de los cérvidos, se realizan estudios sobre la dentición; empleando la cuerna en un menor número de casos.
- HÁBITAT
Es una especie claramente forestal, pudiendo ocupar todo tipo de masas arbóreas; desde robledales hasta pinares. También se deja notar en zonas de matorral o zonas adehesadas.
Siente apetencia por los bosques con matorral diverso, combinando con zonas de pastizal cercano. También se le puede observar en vegas fluviales y áreas agrícolas.
Siente apetencia por los bosques con matorral diverso, combinando con zonas de pastizal cercano. También se le puede observar en vegas fluviales y áreas agrícolas.
- DISTRIBUCIÓN
Teniendo en cuenta las dos subespecies antes nombradas; he de decir que la especie Capreolus pygargus se extiende desde los Urales hasta Corea. Mientras que, la especie de interés para mi estudio, el Capreolus capreolus, se extiende ampliamente por el continente Europeo y Asiático.
- El corzo en la Península Ibérica:
La situación actual de esta especie en España, confirma la tendencia en el conjunto de Europa, con unos núcleos abundantes del corzo en el norte, mientras que hacia el sur se va observando una reducción de los efectivos y fraccionamiento de las poblaciones.
Este cérvido se distribuye en nuestro país de forma homogénea a lo largo de los Pirineos, Cordillera Cantábrica, Montes de León, y mitad norte del Sistema Ibérico, penetrando a lo largo del Sistema Central hasta las proximidades de Gredos. Hacia el sur aparecen poblaciones aisladas de corzos en los Montes de Toledo, Sierra Morena, Sierra de Cádiz y Málaga.
La zona de mayor expansión del corzo se localiza en la mitad norte peninsular; destacando: Pirineos, zona Norte de Castilla y León, La Rioja, Cantabria, Asturias, Sistema central etc.
En Castilla y León, se distribuye por la orla montañosa, penetrando hacia la meseta siguiendo el curso de los principales ríos. Como principales núcleos, destacar la zona de Fuentes-Carrionas (Palencia) y Parque Regional de Picos de Europa (León).
- El corzo en la Península Ibérica:
La situación actual de esta especie en España, confirma la tendencia en el conjunto de Europa, con unos núcleos abundantes del corzo en el norte, mientras que hacia el sur se va observando una reducción de los efectivos y fraccionamiento de las poblaciones.
Este cérvido se distribuye en nuestro país de forma homogénea a lo largo de los Pirineos, Cordillera Cantábrica, Montes de León, y mitad norte del Sistema Ibérico, penetrando a lo largo del Sistema Central hasta las proximidades de Gredos. Hacia el sur aparecen poblaciones aisladas de corzos en los Montes de Toledo, Sierra Morena, Sierra de Cádiz y Málaga.
La zona de mayor expansión del corzo se localiza en la mitad norte peninsular; destacando: Pirineos, zona Norte de Castilla y León, La Rioja, Cantabria, Asturias, Sistema central etc.
En Castilla y León, se distribuye por la orla montañosa, penetrando hacia la meseta siguiendo el curso de los principales ríos. Como principales núcleos, destacar la zona de Fuentes-Carrionas (Palencia) y Parque Regional de Picos de Europa (León).
- ALIMENTACIÓN
Al hablar de la alimentación del corzo, estamos frente a la alimentación de un animal herbívoro rumiante; característica que influirá de manera decisiva en el tipo de alimentación, así como en sus hábitos y costumbres.
Este tipo de animales, herbívoros rumiantes, varían las proporciones de las diferentes plantas en la dieta, según las cantidades disponibles de estas en los ambientes, pero no comen todo tipo de plantas, sino que seleccionan aquellas con altos contenidos en ciertos componentes nutritivos.
Para llevar a cabo el proceso de alimentación, se debe tener en cuenta la búsqueda del alimento, que tendrá fundamentalmente dos objetivos: conseguir el mayor número de nutrientes y reducir el tiempo dedicado a la alimentación.
En lo que se refiere a los requerimientos nutritivos, se consideran generalmente cuatro como los más importantes: energía, proteína, agua y sodio.
En cuanto al tiempo dedicado a la alimentación, se van a encontrar limitados por diversos factores; tales como la temperatura, la capacidad digestiva, presencia de enemigos naturales y del hombre, etc.; por otra parte el corzo deberá alimentarse unas catorce veces al día, luego deberán elegir de manera muy precisa cuando llevara a cabo dicha actividad.
El régimen alimenticio del corzo se puede estudiar por diferentes métodos: la observación directa del animal comiendo, y el análisis de los contenidos estomacales o de las heces.
Los habitats que albergan los corzos, están poblados en su mayor parte por una rica diversidad de especies de plantas leñosas; entre ellas las quercineas, que constituyen más de la tercera parte de la dieta. De este tipo de planta fundamentalmente se alimenta de los frutos, aunque también destaca el consumo de hojas y porque no de tallos.
Los frutos forestales son muy buscados, cabe mencionar la especial debilidad de este animal hacia la bellota, como dato en años favorables llega a representar el 90 % de la dieta otoñal, tratándose de un fruto forestal cuyo contenido nutricional variará según el género de Quercus. De manera aproximada una bellota la composición química de una bellota, seria:
• Agua: 30 %
• Hidratos de Carbono: 52 %
• Fibra: 9%
• Lípidos: 8%
• Proteínas: 5%
• Calcio: 70mg/100g
• Potasio: 600mg/100g
• Fósforo: 80mg/100g
Pero las bellotas son sólo abundantes en otoño y principio de invierno, luego tendrá que ser sustituida por otros alimentos, para completar su dieta, tales como las hiedras, espinos y zarzas, plantas herbáceas, brezo etc.
La hiedra es un alimento fundamental sobre todo en bosques con sustrato calcáreo. Entre las especies de espinos y zarzas, destaca El rosal silvestre o Escaramujo, Rosa canina; en el que aprovecha su fruto, la llamada “Garamita”, rica en Vitamina C.
Otra característica que me gustaría dejar patente, es la variación alimenticia. Puesto que en primavera y verano, los estratos vegetativos ocupan porcentajes similares; pero en invierno, el estrato arbóreo se mantiene en porcentajes similares, mientras que los estratos arbustivos y herbáceos varían considerablemente, duplicándose el arbustivo y casi despareciendo el herbáceo. Dicha variación, en invierno, se debe en gran medida a los rigores invernales y a la necesidad del corzo de ingerir vitamina C, presente en algunas yemas de frondosas y brotes de coníferas.
Resumiendo, el corzo es un herbívoro rumiante, cuya alimentación puede variar en gran medida a partir de numerosos factores. El corzo es un animal muy selectivo en sus alimentos, y de ella forma parte los tres estratos vegetativos (arbóreo, arbustivo y herbáceo). Tanto el estrato arbóreo, como el arbustivo, donde aprovecha frutos, tallos, y brotes tiernos del año. En el estrato herbáceo elegirá las hierbas de su gusto; entre las que destacan las leguminosas.
Este tipo de animales, herbívoros rumiantes, varían las proporciones de las diferentes plantas en la dieta, según las cantidades disponibles de estas en los ambientes, pero no comen todo tipo de plantas, sino que seleccionan aquellas con altos contenidos en ciertos componentes nutritivos.
Para llevar a cabo el proceso de alimentación, se debe tener en cuenta la búsqueda del alimento, que tendrá fundamentalmente dos objetivos: conseguir el mayor número de nutrientes y reducir el tiempo dedicado a la alimentación.
En lo que se refiere a los requerimientos nutritivos, se consideran generalmente cuatro como los más importantes: energía, proteína, agua y sodio.
En cuanto al tiempo dedicado a la alimentación, se van a encontrar limitados por diversos factores; tales como la temperatura, la capacidad digestiva, presencia de enemigos naturales y del hombre, etc.; por otra parte el corzo deberá alimentarse unas catorce veces al día, luego deberán elegir de manera muy precisa cuando llevara a cabo dicha actividad.
El régimen alimenticio del corzo se puede estudiar por diferentes métodos: la observación directa del animal comiendo, y el análisis de los contenidos estomacales o de las heces.
Los habitats que albergan los corzos, están poblados en su mayor parte por una rica diversidad de especies de plantas leñosas; entre ellas las quercineas, que constituyen más de la tercera parte de la dieta. De este tipo de planta fundamentalmente se alimenta de los frutos, aunque también destaca el consumo de hojas y porque no de tallos.
Los frutos forestales son muy buscados, cabe mencionar la especial debilidad de este animal hacia la bellota, como dato en años favorables llega a representar el 90 % de la dieta otoñal, tratándose de un fruto forestal cuyo contenido nutricional variará según el género de Quercus. De manera aproximada una bellota la composición química de una bellota, seria:
• Agua: 30 %
• Hidratos de Carbono: 52 %
• Fibra: 9%
• Lípidos: 8%
• Proteínas: 5%
• Calcio: 70mg/100g
• Potasio: 600mg/100g
• Fósforo: 80mg/100g
Pero las bellotas son sólo abundantes en otoño y principio de invierno, luego tendrá que ser sustituida por otros alimentos, para completar su dieta, tales como las hiedras, espinos y zarzas, plantas herbáceas, brezo etc.
La hiedra es un alimento fundamental sobre todo en bosques con sustrato calcáreo. Entre las especies de espinos y zarzas, destaca El rosal silvestre o Escaramujo, Rosa canina; en el que aprovecha su fruto, la llamada “Garamita”, rica en Vitamina C.
Otra característica que me gustaría dejar patente, es la variación alimenticia. Puesto que en primavera y verano, los estratos vegetativos ocupan porcentajes similares; pero en invierno, el estrato arbóreo se mantiene en porcentajes similares, mientras que los estratos arbustivos y herbáceos varían considerablemente, duplicándose el arbustivo y casi despareciendo el herbáceo. Dicha variación, en invierno, se debe en gran medida a los rigores invernales y a la necesidad del corzo de ingerir vitamina C, presente en algunas yemas de frondosas y brotes de coníferas.
Resumiendo, el corzo es un herbívoro rumiante, cuya alimentación puede variar en gran medida a partir de numerosos factores. El corzo es un animal muy selectivo en sus alimentos, y de ella forma parte los tres estratos vegetativos (arbóreo, arbustivo y herbáceo). Tanto el estrato arbóreo, como el arbustivo, donde aprovecha frutos, tallos, y brotes tiernos del año. En el estrato herbáceo elegirá las hierbas de su gusto; entre las que destacan las leguminosas.
- CONSTUMBRES Y COMPORTAMIENTO
Cuando se trata las costumbres y el comportamiento de un animal, se suele referir principalmente a sus características morfológicas y biológicas principalmente; dejando en un segundo plano la propia actitud del animal en el campo.
Respecto, al corzo me gustaría dejar constancia de unos pequeños esbozos sobre su actitud en el monte. Es un animal de hábitos crepusculares, pero se le puede observar durante las horas de luz sin demasiada dificultad. Las agrupaciones poblaciones son diferentes en verano e invierno, en invierno se forman grupos, de 2 a 10 ejemplares; mientras que en verano se muestra mas territorial, sobre todos los machos, luego los individuos forman parejas o viven de manera solitaria.
Es un animal muy veloz, pero resiste poco; nada bien. Su método de huida ante un peligro es dando grandes saltos, alcanzando estos 2-5 metros, y en ocasiones “ladrando” para avisar al intruso que ha sido visto.
Los machos en el periodo reproductor, se muestran muy territoriales, emprendiendo carreras ante otros machos que invadan
su territorio.
- ENEMIGOS NATURALES Y MORTALIDAD
Todo animal en su medio natural siempre esta amenazada por algún factor negativo, bien sea enfermedades, predadores, el propio ser humano; que le van a llevar a la muerte.
El corzo, es un animal que en muchos casos nunca llega a viejo, ya sea porque cae entre las fauces de un lobo, o porque se quedo debajo de las ruedas de un coche.
Sus enemigos naturales, también llamados predadores, serán aquellos que atenten contra su vida, bien sea contra la del adulto o la de la cría. Una gran parte de las bajas en la especie se produce debido a la muerte de crías, al poseer mayor número de enemigos. Entre estos predadores naturales se pueden destacar:
- El lobo: el gran predador de la península, que encuentra en el corzo un alimento fácil, actuando sobre las crías y sobre adultos.
- El águila real: resulta un depredador circunstancial de adultos y predador constante de crías. Su porcentaje de predación apenas influye en la especie.
- El zorro: el astuto raposo, que en actúa sobre las crías. En ocasiones se ven valientes como para poder con un adulto, sobre todo con las hembras y en ejemplares débiles o enfermos.
- El gato montes: actúa en exclusiva sobre las crías.
- El jabalí: muy poco relevante, pero si se encuentra una cría, podría llegar a darle muerte
La mortalidad de la especie, se debe fundamentalmente, a parte de los ya nombrados predadores, a tres tipos de mortandad:
- Mortandad natural: sería una muerte debida a la vejez del animal, enfermedad o a circunstancias metereológicas. Quizás podríamos incluir aquí, la muerte de un individuo por un predador.
- Mortandad accidental: se representa en las carreteras, en accidentes de tráfico, con el importante problema que representa en Castilla y León. Se estima unos 300 accidentes provocados por la especie.
Los corzos se sienten atraídos por estas zonas, de carreteras, debido a la tierna hierba que crece en cunetas y la presencia de sal echada por quitanieves.
“Como dato o noticia”: decir que, el corzo es la segunda especie de mayor numero de accidentes (35%), precedida del jabalí, y seguida del ciervo y zorro (7%).
Los meses en los que se registran un mayor número de accidentes provocados por especies salvajes son de enero a marzo y de octubre a diciembre, aunque en función de cada especie los meses más “conflictivos” varían: corzos (abril-agosto), jabalís (octubre-enero), zorros (noviembre-enero) y ciervos (todo el año, pero sobre todo octubre-diciembre y mayo-agosto).
De acuerdo con el estudio elaborado por la DGT, el 50% de los accidentes provocados por animales tienen lugar en seis provincias: Burgos (10,8%), León (9,3%), Soria (9%), Asturias (7,8%), Lugo (6,7%) y Palencia (6,1%).
- Mortandad desconocida u otras: en este grupo se incluyen las muertes de perros errantes, posibles muertes de corcinos encamados, por la siega; individuos ahogados en canales de riego, bajas por el furtivismo.
- Ejemplar muerto.
- REPRODUCCIÓN (Fases de la especie)
A pesar de múltiples estudios respecto a la reproducción, sigue siendo un gran enigma, este ciclo en la vida de la especie. Algunos autores dicen que la reproducción del corzo, es una “Reproducción en Silencio”, puesto que si comparamos con otras especies de su misma familia, como puede ser el ciervo o el gamo, pasa muy desapercibida.
- Crías y Nacimientos
El periodo en el que se localizan los partos, resulta esencial en lo que se refiere al éxito en la reproducción, puesto que son los momentos más críticos y de mayor riesgo, y de mayor debilidad tanto de la cría como de la madre.
La época de nacimientos variará en gran medida, dependiendo de la época de cubrición de la hembra y el periodo de diapusa embrionaria. Pero de una manera general se puede establecer entre los meses de Abril y Mayo.
Las Crías del corzo, reciben el nombre de “Corcinos”. Al nacer son de color marrón moteado con numerosas manchas blanquecinas que le servirán de camuflaje.
- Corcino encamado. (Fuente: Internet)
Un dato de importancia respecto a las crías, es el número de corcinos por hembra, suele ser generalmente dos, pero también se dan numerosos casos de un individuo solo y en raras ocasiones de tres ejemplares. En el caso de las hembras de primer parto, primalas, solo tendrán una cría.
También mencionar que la probabilidad del sexo del nuevo corzo, se decanta hacia el lado de las hembras, existiendo una mayor probabilidad de tratarse de una hembra que de un macho.
Durante los primeros días de vida, la cría permanece escondida y es visitada solo ocasionalmente por la madre, para ser amamantada y lamida, con la finalidad de evitar olores que sirvan de atracción a posibles enemigos. En esta época las hembras aparecen muy delgadas, debidos en sus continuos intentos de sacar a sus crías adelante, y con dos pares de ubres inguinales.
En el supuesto de encontrarse con una cría de pocas semanas escondida e inmóvil, a pesar de resultar muy atractiva, es mejor no tocarla ni cambiarla de lugar ya que su madre estará cerca y pendiente de recuperarla. Para evitar este tipo de actuaciones; La Asociación del Corzo Español pone en marcha el Proyecto Corcino, con la finalidad de concienciar a la población para evitar la recogida de crías.
- Madurez sexual
De una manera general, según numerosos estudios, la madurez sexual del corzo es una vez alcanzado el año de edad, pero dicha madurez dependerá del sexo, luego:
En el Macho, la madurez sexual, se alcanza entorno al año de edad. Pero dicha madurez podría tener lugar antes del año. Para entonces el individuo ya puede realizar cubriciones pero su desarrollo de la cuerna sera menor.
- Posible macho en fase de madurez sexual.
El desarrollo total de la cuerna, se alcanza con un edad entre 3-6 años.
En las hembras, es mas tardia que en los machos, 14 meses. Para establecer dicha edad se basa una vez que la hembra que entra en celo, y puede tener descendencia. Dichas hembra que paren por primera vez reciben el nombre de Primalas, y solo traerán al mundo a un corcino.
- Futura hembra reproductora.
- Hembra acompañada de su cría, ya en fase de madurez sexual. (Fuente: Internet)
- Adultos
Para definir este grupo, lo dividiré según los dos sexos, puesto que existen claras diferencias entre ambos ejemplares.
- Macho: claramente diferente de la hembra, por su característica principal, la cuerna. En el periodo en el que el macho no tiene cuerna, se podría confundir con la hembra, pero otros factores hacen notar la diferencia de sexo.
Es más grande que la hembra, además de tener el peso del cuerpo cargado hacia delante. La forma de la cabeza es en vértice, y presencia del pincel de pelos que recubre el pene.
- Macho adulto (Fuente: Internet)
- Macho adulto.
- Hembra: de apariencia mas pequeña que el macho y sin cuerna. Un factor diferenciador del macho, seria la forma del especulo anal, “El escudo blanco”, puesto que en la hembra se aprecia un pequeño rabillo de pelo al final de este, dándole forma de corazón.
- Hembra adulta con tres crías. (Fuente: Internet)
Como curiosidad, dos cosas añadiré:
- Para determinar la edad de un corzo, se puede hacer por varios métodos: el conteo de los anillos de crecimiento presentes en los dientes, la forma del cráneo; y el desarrollo de la cuerna, en el caso de los machos
- En las poblaciones naturales, se presenta de manera general un mayor número de hembras respecto a los machos. Este hecho es debido a que los machos presentan una menor esperanza de vida que las hembras, la menor probabilidad de que el sexo del corcino sea macho y por otra parte son los que sufren el impacto de la caza.
- El Celo
Al igual que el periodo de nacimientos, es una época difícil de determinar concretamente. Pero a partir de numerosos estudios al respecto, se establece la época de apareamiento entre los meses de Junio-Septiembre.
En este periodo, los machos se muestran especialmente territoriales. Dentro de su área de campeo marcan los limites de su territorio, mediante señales visuales, olfativas, ladridos, escarbaderos y rascaduras. También expulsan a posibles intrusos, produciéndose persecuciones, amenazas y en algunos casos luchas.
Como juego previo al propio apareamiento, se producen continuas carreras del macho persiguiendo a la hembra, que corre delante de este con todas sus fuerzas. Una vez que la hembra se deja coger, la carrera se acaba, y acepta el coito.
- Cópula. (Fuente: Internet)
- La Gestación
Una vez finalizado la copula, llegara el momento de la gestación del feto.
La preñez del corzo dura entorno a los 7 meses, pero, si una hembra queda preñada en Julio y la preñez dura 7 meses; los corcinos deberían venir al mundo entorno a Febrero.
¿Por qué nacen entonces en Abril-Mayo? Esto se produce debido a que dicha gestación es interrumpida, que puede durar unas semanas o hasta 5 meses (entorno a 3 meses) según el momento en el que tuvo lugar el apareamiento, se produce una implantación diferida o retardada del embrión en el útero. El huevo fertilizado a principios de verano, no se implanta en la pared uterina hasta el mes de diciembre; es entonces cuando la gestación comienza de manera normal. Estamos hablando de una adaptación que presenta este cérvido, con la finalidad de conseguir que su descendencia nazca en los meses favorables.
En el corzo, es el único cérvido que se conozca, en el que se produzca este fenómeno, la Gestación retardada o Implantación diferida. Desde siempre ha extrañado este proceso en este animal, puesto que estamos hablando de una característica típica de pequeños roedores y mustélidos.
Una vez finalizado la gestación, tendrá lugar el nacimiento de la cría. Suele tener 1-2 crías, raras veces 3, estas permanecen encamadas durante su primera semana y luego siguen a la madre, son amamantadas 2-3 meses y se independizan al cabo de un año
A pesar de múltiples estudios respecto a la reproducción, sigue siendo un gran enigma, este ciclo en la vida de la especie. Algunos autores dicen que la reproducción del corzo, es una “Reproducción en Silencio”, puesto que si comparamos con otras especies de su misma familia, como puede ser el ciervo o el gamo, pasa muy desapercibida.
- Crías y Nacimientos
El periodo en el que se localizan los partos, resulta esencial en lo que se refiere al éxito en la reproducción, puesto que son los momentos más críticos y de mayor riesgo, y de mayor debilidad tanto de la cría como de la madre.
La época de nacimientos variará en gran medida, dependiendo de la época de cubrición de la hembra y el periodo de diapusa embrionaria. Pero de una manera general se puede establecer entre los meses de Abril y Mayo.
Las Crías del corzo, reciben el nombre de “Corcinos”. Al nacer son de color marrón moteado con numerosas manchas blanquecinas que le servirán de camuflaje.
- Corcino encamado. (Fuente: Internet)
Un dato de importancia respecto a las crías, es el número de corcinos por hembra, suele ser generalmente dos, pero también se dan numerosos casos de un individuo solo y en raras ocasiones de tres ejemplares. En el caso de las hembras de primer parto, primalas, solo tendrán una cría.
También mencionar que la probabilidad del sexo del nuevo corzo, se decanta hacia el lado de las hembras, existiendo una mayor probabilidad de tratarse de una hembra que de un macho.
Durante los primeros días de vida, la cría permanece escondida y es visitada solo ocasionalmente por la madre, para ser amamantada y lamida, con la finalidad de evitar olores que sirvan de atracción a posibles enemigos. En esta época las hembras aparecen muy delgadas, debidos en sus continuos intentos de sacar a sus crías adelante, y con dos pares de ubres inguinales.
En el supuesto de encontrarse con una cría de pocas semanas escondida e inmóvil, a pesar de resultar muy atractiva, es mejor no tocarla ni cambiarla de lugar ya que su madre estará cerca y pendiente de recuperarla. Para evitar este tipo de actuaciones; La Asociación del Corzo Español pone en marcha el Proyecto Corcino, con la finalidad de concienciar a la población para evitar la recogida de crías.
- Madurez sexual
De una manera general, según numerosos estudios, la madurez sexual del corzo es una vez alcanzado el año de edad, pero dicha madurez dependerá del sexo, luego:
En el Macho, la madurez sexual, se alcanza entorno al año de edad. Pero dicha madurez podría tener lugar antes del año. Para entonces el individuo ya puede realizar cubriciones pero su desarrollo de la cuerna sera menor.
- Posible macho en fase de madurez sexual.
El desarrollo total de la cuerna, se alcanza con un edad entre 3-6 años.
En las hembras, es mas tardia que en los machos, 14 meses. Para establecer dicha edad se basa una vez que la hembra que entra en celo, y puede tener descendencia. Dichas hembra que paren por primera vez reciben el nombre de Primalas, y solo traerán al mundo a un corcino.
- Futura hembra reproductora.
- Hembra acompañada de su cría, ya en fase de madurez sexual. (Fuente: Internet)
- Adultos
Para definir este grupo, lo dividiré según los dos sexos, puesto que existen claras diferencias entre ambos ejemplares.
- Macho: claramente diferente de la hembra, por su característica principal, la cuerna. En el periodo en el que el macho no tiene cuerna, se podría confundir con la hembra, pero otros factores hacen notar la diferencia de sexo.
Es más grande que la hembra, además de tener el peso del cuerpo cargado hacia delante. La forma de la cabeza es en vértice, y presencia del pincel de pelos que recubre el pene.
- Macho adulto (Fuente: Internet)
- Macho adulto.
- Hembra: de apariencia mas pequeña que el macho y sin cuerna. Un factor diferenciador del macho, seria la forma del especulo anal, “El escudo blanco”, puesto que en la hembra se aprecia un pequeño rabillo de pelo al final de este, dándole forma de corazón.
- Hembra adulta con tres crías. (Fuente: Internet)
Como curiosidad, dos cosas añadiré:
- Para determinar la edad de un corzo, se puede hacer por varios métodos: el conteo de los anillos de crecimiento presentes en los dientes, la forma del cráneo; y el desarrollo de la cuerna, en el caso de los machos
- En las poblaciones naturales, se presenta de manera general un mayor número de hembras respecto a los machos. Este hecho es debido a que los machos presentan una menor esperanza de vida que las hembras, la menor probabilidad de que el sexo del corcino sea macho y por otra parte son los que sufren el impacto de la caza.
- El Celo
Al igual que el periodo de nacimientos, es una época difícil de determinar concretamente. Pero a partir de numerosos estudios al respecto, se establece la época de apareamiento entre los meses de Junio-Septiembre.
En este periodo, los machos se muestran especialmente territoriales. Dentro de su área de campeo marcan los limites de su territorio, mediante señales visuales, olfativas, ladridos, escarbaderos y rascaduras. También expulsan a posibles intrusos, produciéndose persecuciones, amenazas y en algunos casos luchas.
Como juego previo al propio apareamiento, se producen continuas carreras del macho persiguiendo a la hembra, que corre delante de este con todas sus fuerzas. Una vez que la hembra se deja coger, la carrera se acaba, y acepta el coito.
- Cópula. (Fuente: Internet)
- La Gestación
Una vez finalizado la copula, llegara el momento de la gestación del feto.
La preñez del corzo dura entorno a los 7 meses, pero, si una hembra queda preñada en Julio y la preñez dura 7 meses; los corcinos deberían venir al mundo entorno a Febrero.
¿Por qué nacen entonces en Abril-Mayo? Esto se produce debido a que dicha gestación es interrumpida, que puede durar unas semanas o hasta 5 meses (entorno a 3 meses) según el momento en el que tuvo lugar el apareamiento, se produce una implantación diferida o retardada del embrión en el útero. El huevo fertilizado a principios de verano, no se implanta en la pared uterina hasta el mes de diciembre; es entonces cuando la gestación comienza de manera normal. Estamos hablando de una adaptación que presenta este cérvido, con la finalidad de conseguir que su descendencia nazca en los meses favorables.
En el corzo, es el único cérvido que se conozca, en el que se produzca este fenómeno, la Gestación retardada o Implantación diferida. Desde siempre ha extrañado este proceso en este animal, puesto que estamos hablando de una característica típica de pequeños roedores y mustélidos.
Una vez finalizado la gestación, tendrá lugar el nacimiento de la cría. Suele tener 1-2 crías, raras veces 3, estas permanecen encamadas durante su primera semana y luego siguen a la madre, son amamantadas 2-3 meses y se independizan al cabo de un año
Hola David. Te he encontrado comentando a Carlos de "Bicheando". Muy interesante tu entrada. Aunque me la he tenido que leer en dos veces, jeje.
ResponderEliminarSuelo salir al monte, sobre todo por el Alto Tajo, que es lo que más cerca me pilla de Madrid y decirte que corzos suelo ver y oir muy a menudo. Cada vez más confiados del humano. No sé si es que hay más o es que cada vez les vamos acotando más el terreno.
Sigo investigando tu blog. Un saludo!
Gracias por el comentario
ResponderEliminarGracias por la bella creación, por las buenas fotografías, el denso texto, y por instruirnos.
ResponderEliminarYo soy otro Daviz, Geógrafo y Gestor MedioAmbiental.